Las crónicas de Liz parte IV

Martes en la mañana a madrugar de nuevo, ahora nos tocaba ir a Xcaret,había escuchado tanto del lugar que se me antojaba conocerlo .

Llegamos y lo primero que hicimos fue ir al aviario en donde admiramos tucanes, loros y flamingos. Enseguida nos dirigimos a ver la flora así como el invernadero de orquideas, la granja de hongos y una casa maya actual (tema de discución de varios días entre Miguel y yo), el jura que la casa estaba en Chichen Itza yo juro que estaba aquí en Xcaret.



De ahi nos dirgimos hacía el río paraíso, para realizar un pequeño recorrido admirando la belleza y la tranquilidad del lugar, una sola cosa nos pidieron (realizar el viaje en silencio para disfrutarlo más), pero parece que a la gente le dices silencio y hablan más, el vecino de atrás y su adorable criatura no pararon de hablar durante todo el recorrido, pero en fin ibamos en plan de relax y el vecino platicón no interferiría en esto.


De ahí fuimos a nadar hacia los ríos subterráneos, de tin marin de do pingüe, a cual de los dos
vamos primero.
En ese momento un grupo de extranjeros decidió tomar el de la izquierda, así que preferimos ir al de la derecha , estaría más vacio. (si como no).
Ibamos uno detrás del otro , con el snorkel, las aletas y el visor, no había muchos peces , pero si un mundo de animales (perdón turistas nacionales), nadando adelante, en medio, atrás de mi.



Los que venian adelante de mi eran bastante singulares, me sentí como en el metro por un momento.
De ellos alcance a escuchar algo así:
-Mira un alga


-¿En dónde compadre?


- Responde la comadre: Es que mi marido me acaba de agarrar una nacha


- Y mira el cenote


- Yo aquí veo dos compadre


O sea, de que se trataba el asunto, en cuanto pude me adelante era demasiado , lo juro.
El recorrido fue padre, pero nada más, no me impresionó como yo hubiera esperado.
Salimos y decidimos tomar el otro río, en esté había muy poca gente, casí nadie y lo pudimos disfrutar, más místico, más relajante,esté si me gustó.
Después de tanto ejercicio justo era que comieramos, lo cual hicimos con singular entusiasmo.


Y de ahí a ver un espectáculo de caballos y a Xcaret de noche.
Me gustó mucho el show, lo disfruté enormemente y me sentí muy orgullosa de ser mexicana.

4 comentarios:

James dijo...

Liz!! Pues sigo leyendo tu crónica... me créeras que a mi esos shows me aburren... si ya sé, me deberían gustar pero es que no les encuentro el chiste...
Saludos!!!

Elizabeth Plascencia dijo...

No te preocupes, Miguel comentó lo mismo, que a él solo le gustaba la primera parte, en la segunda que hay bailes regionales yo disfruté mucho, pero es cuestion de gustos y todos se respetan.

Luna Quisan dijo...

ajajajaa que onda con esos compadres!! que risa!! Pero si esos espectaculos son de lo mejor, recuerdo que mi papá compró hasta el cd, salió muy emocionado, estan muy bonito y efectivamente sales muy orgullosa de ser Mexicana!

Elizabeth Plascencia dijo...

Viva México , Luna